La mascarilla en exteriores ya no es obligatoria, tampoco a menos de 1,5 metros

10 febrero, 2022

La mascarilla ya no será obligatoria en exteriores, aunque en la práctica no se cumple

La mascarilla ya no es obligatoria en exteriores, ni siquiera en el recreo. Tampoco es obligatoria aunque haya menos de 1,5 metros de distancia entre personas no convivientes. Esta obligación sí estuvo presente desde el mes de junio hasta diciembre. Ahora, sin embargo, es posible pasear en todo momento por la calle sin mascarilla.

El BOE del 9 de febrero enumera las condiciones en las que la mascarilla es obligatoria, y son solo tres espacios:

  • En cualquier espacio cerrado de uso público o que se encuentre abierto al público.
  • En los eventos multitudinarios al aire libre, cuando los asistentes estén de pie. Si están sentados, será obligatorio cuando no se pueda mantener una distancia de seguridad de al menos 1,5 metros entre personas, salvo grupos de convivientes.
  • En los medios de transporte aéreo, en autobús, o por ferrocarril, incluyendo los andenes y estaciones de viajeros, o en teleférico, así como en los transportes públicos y privados complementarios de viajeros en vehículos de hasta nueve plazas, incluido el conductor, si los ocupantes de los vehículos de turismo no conviven en el mismo domicilio. En espacios cerrados de buques y embarcaciones cuando no se pueda mantener la distancia de seguridad de 1,5 metros, salvo grupos de convivientes.

Es decir: cuando paseas por la calle o estés en un banco o terraza no será necesario llevar mascarilla. Sí será necesaria en conciertos, teatro, actuaciones, procesiones, manifestaciones o partidos de fútbol. Igualmente será necesaria en las estaciones de bus y tren. Y, según el BOE, también cuando viajes con no convivientes en el coche.

El Ayuntamiento regulará también el uso de la mascarilla en las instalaciones deportivas al aire libre, como Mendizorrotza o los distintos campos de fútbol.

Excepciones al uso de la mascarilla

La mascarilla tampoco será obligatoria en interiores para usuarios de residencias, para actividades en las que sea incompatible ni para personas con dificultad respiratoria.

Estas son las excepciones:

  • A las personas que presenten algún tipo de enfermedad o dificultad respiratoria que pueda verse agravada por el uso de la mascarilla o que, por su situación de discapacidad o dependencia, no dispongan de autonomía para quitarse la mascarilla, o bien presenten alteraciones de conducta que hagan inviable su utilización.
  • En el caso de que, por la propia naturaleza de las actividades, el uso de la mascarilla resulte incompatible, con arreglo a las indicaciones de las autoridades sanitarias.
  • En aquellos lugares o espacios cerrados de uso público que formen parte del lugar de residencia de los colectivos que allí se reúnan, como son las instituciones para la atención de personas mayores o con discapacidad, las dependencias destinadas a residencia colectiva de trabajadores esenciales u otros colectivos que reúnan características similares. Siempre y cuando dichos colectivos y los trabajadores que allí ejerzan sus funciones tengan coberturas de vacunación contra el SARS-CoV-2 superiores al 80 % con pauta completa y de la dosis de recuerdo, acreditado por la autoridad sanitaria competente. La mascarilla sí será obligatoria para las visitas y los trabajadores de residencias de personas mayores o con discapacidad.

¿Y en el recreo?

La Portavoz del Gobierno Central aseguraba este martes que los niños podrán jugar en el recreo sin mascarilla. Es decir: que la mascarilla tampoco será obligatoria en exteriores de los colegios. El GObierno Vasco ha confirmado este mismo jueves que ya no será necesaria la mascarilla.

La vacunación a menores de 11 años está ya en el 50%, y un 20% de los menores han pasado el virus en el último trimestre.

LABI

Este jueves se reúne además el LABI, donde podría anunciar la relajación de algunas restricciones, tal y como ha dejado caer el Gobierno Vasco. Aún así, para este fin de semana aún seguirán en vigor las restricciones de horarios y aforos.

Una decisión política

La mascarilla en exteriores volvió el pasado 24 de diciembre tras una conferencia de presidentes autonómicos. Una medida que se tomó sin ninguna base científica y que, en la práctica, apenas se ha cumplido. Quien quería llevar mascarilla, la llevaba. Y quien no quería, no la llevaba.

En realidad desde hace semanas las calles de Vitoria-Gasteiz ven a numerosas personas caminando sin mascarilla. Es una medida que en ningún momento se ha hecho cumplir, ante la ilógica de su aplicación y la falta total de respaldo científico. Las voces científicas insistían en que la mascarilla en exteriores era innecesaria. Es más, algunos expertos alertaban de que este uso continuado era perjudicial.

Las instituciones consideraban que el uso obligatorio de las mascarilla puede aumentar su uso donde ya era obligatorio: allí donde no hay distancia de seguridad. De hecho el Gobierno Vasco fue una de las instituciones que más rogó a Sánchez para obligar a llevar mascarilla en exteriores.

La mascarilla en exteriores con distancia interpersonal no ha sido obligatoria en ningún país de la UE. De hecho la comunidad científica ha comprobado que es una medida innecesaria para combatir la pandemia.

El coronavirus se propaga, según la ciencia, en lugares interiores mal ventilados, y apenas aguanta unos minutos en el aire, por lo que en espacios ventilados o al aire libre apenas está presente. Sin embargo, es una de las medidas adoptadas por el Gobierno Central para esta Navidad. Otra de las medidas que se ha confirmado inútil es la fumigación o incluso el uso de gel hidroalcohólico.