Medio centenar de personas con sus perros denuncian los últimos envenenamientos

Medio centenar de personas y sus mascotas han protagonizado a partir de las 12.00 horas una concentración en la Virgen Blanca para denunciar los últimos envenenamientos de perros. A finales de septiembre y en apenas 48 horas, murieron dos animales por esta razón, según notificaron los veterinarios a sus respectivos dueños. Al parecer, Flecha se intoxicó mientras paseaba por Aranbizkarra y Rocky en El Pilar.

El matrimonio de avanzada edad que compartía su vida con Rocky ha acudido al evento con una imagen del animal. Su dueña, María del Carmen, no ha podido contener las lágrimas al hablar sobre el Yorkshire de 21 meses que "tanto cariño" le daba. "Psicológicamente, me encuentro muy mal, su muerte me ha afectado muchísimo. Es muy injusto. Lo crías, lo quieres y lo tienes en tu casa como si fuera una persona más. Y luego viene un loco o un malvado a echarle veneno a los animales, que no se meten con nadie".

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Rocky empezó a sentirse mal a las 7 de la mañana y a las 16.00 horas del mismo día ya estaba muerto. "Lo llevé al veterinario, lo ingresaron, le pusieron de todo, suero, etc. Les dije en la clínica que por dinero que no fuera, que hicieran todo lo que pudieran". Sin embargo, los esfuerzos de los profesionales no lograron evitar el fallecimiento del animal, que "se desangró en tres horas". El veterinario les confirmó que había sido envenenado.

"No sabes lo qué le pasa al animal y, para cuando te das cuenta, ya es tarde. Cuando son pequeños, como Rocky, vas aún más a contrarreloj", ha añadido un participante del evento.

En cuanto a las causas del envenenamiento, el marido de María del Carmen asegura que Rocky "no comió nada, olería algo tóxico. Yo siempre estuve tirando de la correa mientras paseábamos, por lo que no pudo llevarse algo del suelo a la boca. Los dueños de algunos perros comentan que se puede deber a alguna droga adulterada que inhalan los animales".

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Otro asistente a la convocatoria también ha explicado que "podría tratarse de algún polvo que huelen los perros y se les mete en el sistema respiratorio. De momento, la Policía Local no nos ha dicho cuál puede ser el origen del veneno".

Una perrita mestiza llamada Toy, que fue "adoptada de la perrera en 2012", como ha explicado su dueña, planteaba un interrogante difícil de aclarar: '¿Por qué me envenenas?' Es una pregunta sin una respuesta lógica que los asistentes al acto se hacen en nombre de sus perros.

María del Carmen afirma que "no hemos puesto denuncia, como tampoco lo han hecho muchos otros dueños de perros envenenados. Creo que una denuncia no serviría de nada. Se dice que la policía está intentando encontrar al responsable".

Pero, "¿cómo van a coger a una persona que en un instante suelta un cacho de pan envenenado o carne con alfileres en el césped?", expresa su escepticismo. "Además, al ser perros los perjudicados, nadie te escucha", critica en alusión a las autoridades e instituciones. Sin embargo, desde protectoras de animales como la vitoriana Apasos aconsejan siempre en estos casos no dejarse llevar por el desánimo y poner una denuncia en la policía.

• Futuras concentraciones

A pesar de ello, "la sensación de abandono, de falta de información oficial sobre los casos de envenenamiento y de un interés escaso por parte de las instituciones" son compartidos por la mayoría de los asistentes a la concentración. Incluido Alex Moreno, organizador del evento a través de Facebook, quien considera "nula" la actuación de la policía y el Ayuntamiento en estas situaciones.

"Ahora tengo mi primer perrito, de siete meses, y lo quiero como si fuera mi hijo. He pasado muchas tardes de llorera leyendo los relatos del propietario de Flecha y de los dueños de los perros que fueron envenenados en Galdakao. Veo la injusticia que hay en todo ésto y pienso que no puede seguir así", ha argumentado.

"Había que dar un paso adelante y concienciar más la gente. Y no sólo a los dueños de los perros, ya que la aparición de veneno en parques donde juegan los niños supone un riesgo para la salud pública". Por eso, ha hecho un llamamiento a la sociedad en general. "Necesitamos una mayor implicación política, institucional y ciudadana".

Durante el evento, Alex ha anotado "más de 200 teléfonos para crear un grupo de dueños de perros". Asimismo, se ha puesto en contacto con los miembros de Apasos de cara a una futura concentración, que espera sea inminente. "Intentaremos llevar veterinarios para que den clases básicas de primeros auxilios y nos digan cómo reaccionar frente al envenenamiento de nuestra mascota".

• "Inacción municipal"

Óscar Fernández, concejal de Irabazi en el Ayuntamiento de Vitoria, ha estado presente en el evento y ha compartido la opinión mayoritaria de los participantes con respecto a la "inacción municipal" que existe al abordar los envenenamientos de perros. "Nos da pena que se trate de invisibilizar este tipo de casos en una ciudad declarada libre de maltrato animal. Igual lo hacen por no crear alarma social, pero no es de recibo que sean los propios ciudadanos quienes se tengan que organizar".

"La vigilancia policial debería aumentar en los jardines donde haya sospechas de la aparición de veneno, aunque luego no se confirmen. Y desde Salud Pública y Medio Ambiente se debería informar y dar las pautas a seguir para prevenir estas situaciones. Pero falta voluntad política, ya que no es una cuestión de dinero", ha manifestado.