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Michelin España vota 'sí' al convenio, pero en Álava gana el no
La plantilla de Vitoria-Gasteiz vota en contra, pero la mayoría a nivel nacional lo respalda
'Sí' al convenio. La plantilla de Michelin ha hablado. Lo ha hecho en las urnas, donde a lo largo de 39 horas el personal de las factorías de Vitoria-Gasteiz, Valladolid, Aranda de Duero y Almería han depositado sus votos.
El resultado mayoritario entre las 4 plantas ha sido un 'sí' al convenio que descarta la huelga general. La plantilla, a nivel global, ha preferido aceptar la última oferta que planteaba la dirección de la multinacional gala.
Rechazo en Vitoria
En Vitoria-Gasteiz, la participación ha sido muy elevada. Han votado 3.108 personas, casi el 89% del censo de los 3.494 empleados. El 'no' ha ganado en la factoría vitoriana, con cerca del 65% de los votos (2006). Mientras que el 'sí' al convenio ha obtenido un respaldo de 1.093 papeletas.
Sin embargo, el resultado a nivel grupal ha sido distinto. En conjunto, el referéndum ha registrado una participación total del 87,86% (5.831 trabajadores) de la plantilla. De ellos, 3.297 (un 56,54%) han votado a favor.
Desde CCOO recuerdan que ha sido la plantilla la que "ha mostrado su conformidad democráticamente con la propuesta de convenio colectivo". En un comunicado, agradecen la participación, así como el "comportamiento y compromiso demostrados" durante el referéndum.
Un respaldo que tendrá su reflejo en el comité intercentros. Allí, CC OO (mayoritario en este órgano y en el comité de empresa de Vitoria-Gasteiz), junto con UGT, CSIF y USO apoyarán el convenio. Sus votos suman 10 de los 13 totales. El resto de delegados pertenecen a CGT, ELA y ESK, que en los días previos ya habían adelantado su rechazo.
Tras este trámite, será el turno de una nueva y, por ahora última, reunión de la mesa negociadora con la empresa. Porque el plazo de 72 horas que la compañía había dado al comité intercentros expira en breve. En ella, rubricarán la entrada en vigor del nuevo convenio.
Su firma supone, para cada empleado, una prima no consolidable de 1.500 euros. Además, contarán con una garantía salarial no ligada a los resultados (índice ROS) y la supresión de las jornadas de desarrollo o 'team building'.
Son algunas mejoras respecto de la que se había considerado como la "última oferta" de la compañía. Sin embargo, las concentraciones, manifestaciones y huelgas en Vitoria-Gasteiz no han conseguido uno de los objetivos prioritarios, la garantía de una subida ligada al IPC real.
Cronología
La firma del convenio supone el cierre a casi un mes de conflicto que comenzó el pasado 18 de mayo. Ese día, todos los sindicatos convocaron una concentración a la entrada de la factoría de Vitoria-Gasteiz. El respaldo fue mayoritario. Pocos días después, tras la propuesta de la dirección, la unidad sindical se rompió.
El temor de la minoría del comité (CGT, ELA, ESK y LAB con 12 de los 27 delegados) a que se aprobara el convenio desencadenó una serie de concentraciones, manifestaciones y 4 jornadas de huelga que reunieron a buena parte de la plantilla vitoriana. Mientras, la mayoría sindical reclamaba tiempo para que las afiliaciones respectivas votaran.
El resultado, el esperado. Un no unánime en las asambleas, que hace una semana obligó al comité intercentros a presionar a la empresa y exigir una nueva reunión y propuesta en 72 horas. El martes, la dirección cumplió y, tras una sesión maratoniana, ofreció las condiciones ya sabidas. Y devolvió el ultimátum a los sindicatos.
Tres días después, la plantilla de Michelin ha hablado. Y votado. Habrá convenio antes de la llegada del nuevo director en Vitoria-Gasteiz.
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