Muere un preso en la cárcel de Zaballa

15 marzo, 2025

El hombre, de entre 34 y 35 años, era vecino de Vitoria-Gasteiz

  • Actualizado a las 8:30

Un preso de entre 34 y 35 años falleció este viernes en la cárcel de Zaballa. Era un vecino de Vitoria-Gasteiz que apareció muerto en su celda, según informa Salhaketa Araba.

El hombre, padre de un hijo, "se encontraba encerrado en un módulo de respeto en el CP de Zaballa". Según la información facilitada por Salhaketa (asociación de apoyo a las personas presas), "estaba recibiendo medicación psiquiátrica en cantidades ingentes", algo que rechaza la familia. Fuentes cercanas a la víctima sostienen que el fallecido tomaba únicamente pastillas ansiolíticas para dormir.

carcel zaballa

Salhaketa también explica que "se encontraba en la celda acompañado por otra persona presa en el mismo modulo. Intuimos que este acompañamiento en la celda dependiera de la activación del protocolo anti-suicidios. Un protocolo que prevé como medida principal la asignación urgente de un interno de apoyo”.

Es decir, "una persona sin formación médico-sanitaria y que muchas veces no quiere asumir esta carga de responsabilidad a la que se ve obligado, sobre todo teniendo que hacerse cargo de los cuidados de una persona con un historial psiquiátrico y que necesita atención especializada y un seguimiento adecuado", señala.

Sin embargo, fuentes de la familia rechazan la información facilitada por Salhaketa, y aseguran a Gasteiz Hoy que el acompañante de la víctima era un preso común. Insisten también en que los celadores no acudieron a la llamada del acompañante cuando este activó la alarma porque el fallecido se encontraba mal. E insisten en que llevaba días quejándose de que se encontraban en mal estado de salud.

"Ya van nueve muertes en Euskadi"

"Ya van nueve muertes en las cárceles de Euskadi desde la asunción de competencias por parte del Gobierno Vasco en 2021", denuncia Salhaketa.

La asociación critica que "la asistencia médica en prisión es insuficiente, superficial y de difícil acceso". Además, "la falta de comunicación y ocultamiento de información con las familias y el exterior, en referencia a estas muertes, es sistemático por parte de los responsables penitenciarios".

"No hay que olvidar el efecto dañino en la salud que se impregna en los cuerpos en prisión: el aislamiento, las difíciles dinámicas relacionales, la mala alimentación, las relaciones de subordinación con el entorno", añade.