Las multas de todo tipo se disparan en Vitoria-Gasteiz por una 'huelga' de la Policía Local

8 noviembre, 2017

En la última semana se han multiplicado las sanciones por diferentes conceptos

Los ciudadanos de Vitoria-Gasteiz viven desde hace unos días sometidos al cumplimiento más estricto de la ley. Varios agentes de Policía Local han impuesto en la última semana un aluvión de multas, fruto de una huelga de celo iniciada por varios agentes de Policía Local que reclaman una mejora en sus condiciones laborales. Una huelga que ha llevado a estos agentes a hacer cumplir a rajatabla el código de circulación y las normas municipales.

En los últimos días se ha multado a gente por cruzar en rojo un semáforo, por aparcar donde no se puede o por otras infracciones que los agentes suelen pasar normalmente por alto. En realidad los agentes están cumpliendo con la legalidad al 100%, pero esta situación ha generado el enfado de los afectados.

Oficialmente los sindicatos niegan que exista ninguna huelga, pero desde el equipo de Gobierno sí confirman un aumento en las multas. El Ayuntamiento se ha ofrecido a negociar, al tiempo que piden no cargar sobre los ciudadanos un conflicto laboral.

Este exceso de celo está relacionado con los encontronazos que, desde hace unos meses, mantienen algunos sindicatos de la Policía Local con el Ayuntamiento. Una situación dada por la escasez de agentes y por las obligaciones de hacer horas extra.

Actualmente existen 371 agentes de Policía Local, cuando debería haber 431. Pese a la actual OPE de 32 agentes, la plantilla quedará en 358 en los próximos años, una cifra inferior incluso a la actual, fruto de las jubilaciones (22 este año y otros 9 en 2018.

Carlos Zapatero, concejal de Seguridad Ciudadana, ha mostrado la disposición favorable del Gobierno Municipal para encontrar una solución “dialogada” a la movilización emprendida en los últimos días por los agentes municipales, que exigen una mejora de sus condiciones laborales, y que se está materializando en forma de un incremento en el número de denuncias interpuestas por Policía Local.

El concejal de Seguridad Ciudadana ha advertido que para este Gobierno no caben presiones, y mucho menos aquellas que afectan y perjudican directamente a la ciudadanía, como es el caso. Por eso no atendemos este tipo de presiones. Sólo atendemos al diálogo”.

En la reunión de hoy, los sindicatos han trasladado al departamento de Seguridad Ciudadana la necesidad de cubrir las vacantes, “algo en lo que ya venimos trabajando desde hace tiempo, como han reconocido los propios sindicatos”El concejal ha recordado la OPE de 32 agentes, que ya están formándose en Arkaute.

El PP la lamentado que “los agentes han estallado con una campaña intensiva de multas en señal de protesta porque se sienten abandonados por el Gobierno de Urtaran. Estamos ante una huelga de celo encubierta y los perjudicados
somos los vitorianos, que estamos pagando el pato de la mala gestión de Urtaran”, advierte el concejal del PP en Vitoria Gustavo Antépara.

Podemos, por su parte, ha pedido al equipo de Gobierno que tome cartas en el asunto:  “Creemos que los agentes se han equivocado con las formas de su reivindicación, pero el gobierno no debe aprovecharse del rechazo social que
ha causado la protesta para lavarse las manos y evadirse del problema que existe en el Cuerpo. Un problema de falta de efectivos que afecta, en realidad, a toda la ciudadanía. ¿Sabe la gente que ahora mismo sólo hay entre una y dos patrullas de noche para todo el municipio?”, ha señalado el portavoz de la formación morada, Jorge Hinojal.

Además, Carlos Zapatero ha recordado que en 2018 el Ayuntamiento convocará una nueva oferta pública de empleo, “para lo que ya se han dado pasos como la convocatoria de procesos de promoción interna. También estamos pendientes de la publicación del decreto de jubilaciones del Gobierno central para saber en qué medida afecta y definir el número de plazas. Nuestra intención es convocar el máximo”.

Por otra parte, Seguridad Ciudadana ha trasladado a los sindicatos su voluntad a negociar los “días en negrita”, en los que los agentes no pueden solicitar permisos. “Como se puede ver, nuestra intención de apostar por el diálogo es clara; pero a lo que no estamos dispuestos es a que se utilice a los vecinos y vecinas como moneda de cambio”.