La muralla medieval de Vitoria tendrá un segundo mirador

29 julio, 2022

La futura atalaya se situará en la plaza Martin Ttipia, aprovechando uno de los torreones de la muralla

La muralla medieval de Vitoria-Gasteiz es uno de los principales reclamos turísticos de la ciudad. Y una de sus señas de identidad. En unos meses, tendrá un atractivo más para gasteiztarrak y turistas. Un segundo mirador que se levantará en la plaza Martin Ttipia y al que se podrá acceder por Fray Zacarías Martínez.

En concreto, será entre las traseras del Palacio Villa Suso y el cantón de La Soledad donde se construya esta estructura, que aprovechará los vestigios de un torreón adosado a la muralla del siglo XI. En su interior, se instalará una estructura metálica y de madera. Esta escalera dará acceso a una plataforma ubicada dentro de la torre.

Panorámica del sur de Vitoria

Desde esta atalaya, los visitantes podrán contemplar una amplia panorámica del sur de la ciudad. Una vista que abarca desde las torres de Zabalgana hasta Olárizu, con los tejados del Ensanche como contrapunto.

Mirador muralla medieval

Parte de las vistas que se admirarán desde el futuro mirador.

El proyecto está valorado en unos 100.000 euros, y el Ayuntamiento lo ha presentado a la convocatoria extraordinaria del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino 2022. Su objetivo es lograr fondos europeos Next Generation para poder llevarlo a cabo. No obstante, fuentes municipales consideran que, de no conseguirlos, el mirador será una realidad "a lo largo del próximo año", ya que su presupuesto resulta "bastante asumible".

“La ubicación estratégica y la altura de esta torre nos permitirán recuperar su función de atalaya y contemplar el sur de la ciudad, con los Montes de Vitoria de fondo”, explica Maider Etxebarria. La primera teniente de alcalde y concejala de Promoción Económica y Turismo asegura que este segundo mirador será "una vista privilegiada".  Una postal "de nuestro conjunto urbano que disfrutarán los turistas y, por supuesto, todas las personas que vivimos en Vitoria".

mirador muralla medieval Vitoria

Torreón sobre el que se levantará la atalaya.

Cerca de la nevera Olave

La futura atalaya se erigirá a escasos metros del primer mirador de la muralla hacia la ciudad medieval. Una pasarela inaugurada en 2011 en las traseras de la iglesia San Miguel y del palacio Villa Suso. Rodeada de una celosía fabricada con madera de cedro, la estructura alcanza la que fuera la altura original del muro medieval, y se corresponde con el antiguo paso de ronda.

Desde ella, los visitantes pueden observar los restos arqueológicos de la antigua nevera Olave, situada metro y medio por debajo del nivel del suelo. Descubierta durante las obras para construir un parking, la nevera data del siglo XIX. La edificó el comerciante Clemente Olave para abastecer de hielo a Vitoria-Gasteiz. En ella se almacenaba la nieve que traían del Gorbea y, con sus 8 metros de profundidad, podía albergar hasta 45.000 litros.

muralla medieval nevera

La nevera Olave y el primer mirador construido en 2011.

En su momento, la recuperación de este espacio de alto valor histórico y la creación del primer mirador sobre el muro defensivo medieval obtuvo una mención especial en los premios Europa Nostra. Sin embargo, esta pasarela está cerrada de forma habitual. Solo pueden acceder a ella las visitas guiadas. Además sus vistas, salvo por la nevera, se encuentran bastante limitadas por la iglesia San Miguel, a la que mira.

Por este motivo, el nuevo mirador cobra más importancia, ya que su acceso estará abierto permanentemente y su visibilidad es más amplia. La intención es fabricarlo con materiales que le doten de una continuidad estética con el entorno.

Mirador nuevo muralla medieval

Así, la torre se integrará con las labores de recuperación de 2011, y se generará un espacio uniforme. "En consonancia con el diseño arquitectónico del itinerario que se puede visitar en el resto de tramos de la muralla", constatan desde el Ayuntamiento.

Una vez este espacio se recupere y acondicione como lugar visitable, potenciará el interés en la muralla prefundacional del siglo XI. "Ayudará a completar un catálogo más tupido de recursos turísticos en la zona entre los palacios Montehermoso y Villa Suso, lo que añadirá atractivo a las visitas al Casco Medieval de la ciudad", indican en el Consistorio.