Prohibido potear en la calle, vigilancia policial y aforo en la puerta: la fiesta en la 'nueva normalidad'

La 'nueva normalidad' llega este fin de semana a Vitoria-Gasteiz. Con ella llega también la apertura de pubs y discotecas, y la mayor libertad para los bares. Volverán, por lo tanto, muchos más clientes a los locales del Casco Viejo. Pero el Ayuntamiento lo tiene claro: el ambiente no puede ser el mismo que el de antes de la pandemia. La precaución debe estar siempre presente, los hosteleros también lo saben y por eso buscan ayuda del Ayuntamiento. El buen tiempo que se espera para este sábado animará aún más a los vitorianos.

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Ayuntamiento, Policía Local y algunos hosteleros del Casco Viejo se han reunido este viernes para poner en común las preocupaciones de todos los colectivos. El Departamento de Espacio Público, el de Promoción Económica y la propia policía municipal están coordinándose para evitar situaciones de riesgo. La semana pasada, en Fase 3, ya se vio cierto descontrol en algunos momentos.

Aforo señalizado

El control por parte de hosteleros e instituciones será mayor este fin de semana. Habrá vigilancia policial por el Casco, y los bares y establecimientos tendrán que tener en el exterior un cartel que indique el aforo máximo que pueden acoger. No basta con el control de aforo por parte del bar, ni siquiera con iniciativas originales como los semáforos.

Este jueves agentes de Policía Local recorrieron los establecimientos para pedirles a los hosteleros que el aforo permitido esté en un lugar visible. Y muchos ya han puesto el aforo, que busca concienciar a los clientes y facilitar el trabajo a los agentes cuando tengan que vigilar el cumplimiento de las normas. El aforo permitido en la 'nueva normalidad' es el que permita mantener una distancia de 1,5 metros en el interior de los bares.

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Prohibido beber en la calle

El Ayuntamiento también recuerda que no está permitido beber en la calle, y que se hará especial hincapié en esta prohibición durante estos días. Esto no es una novedad: la ordenanza municipal no permite nunca beber en la calle, pero está tan arraigado en la tradición vitoriana que no se vigila.

"Normalmente se hace la vista gorda, pero ahora recordamos que solo se puede beber en mesas o en el interior de los locales", afirman fuentes municipales. Por lo tanto, los hosteleros no podrán servir a gente que no tenga mesa en el exterior o sitio en el interior. Es decir: no se verán las imágenes tan habituales de poteo en la calle. Solo se podrá servir a quien esté en el interior (y no podrá sacar las bebidas) o a quienes estén en la terraza.

Precisamente, los encargados de los bares y pubs pedían hace unos días más medidas o control a las instituciones para evitar multas o infracciones de la normativa. "Somos hosteleros, no policías. No podemos controlar todo", denuncia Álvaro Tobalina, del 1. Su local de la Kutxi volvió a abrir la semana pasada con malas sensaciones: "El primer día siempre es el peor. No podíamos controlar que la gente mantuviera la distancia o use mascarilla. Salieron con muchas ganas, pero esperemos que a partir de ahora se acostumbren a cumplir las normas sanitarias".

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Llegan las discotecas

Sin embargo, los pubs y discotecas recibirán a la clientela este fin de semana por primera vez desde hace tres meses. Algunos ya está promocionando la apertura en redes sociales. Algunos establecimientos, como La Dolce Vita, han incluido incluso un sistema de reserva de mesas: