Nuevo ataque a las ambulancias de Álava

Las ambulancias de la UTE Larrialdiak han sufrido este miércoles nuevos ataques de ambulancias en Vitoria, Legutio, Zambrana, Amurrio, Laudio. Desconocidos han arrojado pinturas y huevos contra 7 ambulancias. Además en algunas de ellas se ha colocado poliuretano en los frenos de algunas de ellas.

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También ha habido un ataque con pintura en la base de Murgia y se ha roto la cerradura de la base de Zaramaga.

Una actuación que está relacionada con el conflicto que desde hace tres años sufren los trabajadores de ambulancias, y que se ha sucedido desde Larrialdiak entró en la gestión. Los problemas se han sucedido, así como la situación de huelga. Huelga inexistente porque los servicios mínimos son del 100%.

Larrialdiak Maiz controla actualmente casi todo el transporte sanitario urgente de Álava (Ambuibérica cuenta con una ambulancia). Los trabajadores han denunciado en varias ocasiones las condiciones en que trabajan, y este lunes protestaron frente a los juzgados, ante un juicio que finalmente se suspendió.

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En septiembre los trabajadores denunciaban el lamentable estado de sus instalaciones. Son sólo algunas de las protestas, que también tienen que ver con la falta de mantenimiento de los desfibriladores, la ausencia de equipos de protección (botas, guantes o ropa de abrigo) y escasez de guantes, medicación o sueros.

Los trabajadores denuncian intentos por descolgarse del convenio o incumplimientos del calendario. Pero, además denuncian que “falta muchísimo material en las ambulancias, cosas elementales que tendríamos que llevar, pero que se terminan y no nos reponen”. También denuncia el riesgo por la falta de material: “No están cumpliendo con normativa reflectante, nos ponen en riesgo”. También denuncian que no tienen ropa de abrigo y que las ambulancias están sin cadenas o sin ruedas de invierno para cuando llegue el frío.

El pasado lunes los trabajadores de Larrialdiak se concentraron frente a los juzgados, en un juicio contra la empresa. Sin embargo el juicio se tuvo que suspender porque el abogado de la empresa renunció a representarla.

Larrialdiak se niega a aceptar el convenio previo firmado, y optó por el descuelgue de forma unilateral. Ante esta decisión los trabajadores lo llevaron a juicio. Los trabajadores piden al Gobierno Vasco que haga cumplir a Larrialdiak el convenio. En realidad el descuelgue de esta empresa es unilateral, sin sentencia al respecto.