Partyman: el superhéroe vitoriano de la fiesta
Richard Eros, animador y humorista, representa su propio espectáculo y ha estado en programas como 'First Dates'
“A la vida hay que salir a jugar y no a juzgar”. Es la filosofía de vida de Partyman, animador, humorista y bailarín profesional. Se define como el superhéroe de la fiesta, un showman cuya misión es “divertir y unir a las personas”.
Pero detrás del disfraz se encuentra el vitoriano Richard Eros, un apasionado del mundo del arte y la interpretación. Su vocación le ha llevado a crear espectáculos y “nuevas experiencias” para el público.
Se ha formado en teatro, clown, comedia gestual, interpretación, improvisación, teatro físico, baile, monólogo stand-up, etc. Empezó su carrera como showman con 18 años, gracias a su primo Javier. “Él tenía una empresa de espectáculos y me llamó para participar en una verbena infantil mientras compaginaba mis estudios”, expresa.
Después de muchos espectáculos, Richard fue cogiendo tablas y experiencia: “Cada vez tenía más seguridad, me divertía más, la gente se divertía conmigo y llegó un punto en el que hacía las actuaciones solo”. Su primo dejó la empresa y abrió la escape room Escapeleku, así que Richard creó el show de Partyman por su cuenta.
El superhéroe de la fiesta
“Me gustaban mucho los superhéroes y quería transmitir un mensaje educativo a los niños, por eso pensé en mezclar la fiesta y los superhéroes”, comenta. Ahí empezó su aventura de actuar en pueblos, colegios y eventos. “Cada año tengo un show nuevo con canciones adaptadas a los tiempos actuales, pero nunca pongo reggaetón, porque quiero educar en valores”, recalca.
En sus shows incluye bailes con coreografías para los más pequeños. “Tengo un estilo muy personal que mezcla lo cómico y lo visual, me gusta el freestyle, así que he aprendido a bailar por mi cuenta”, cuenta.
Desde siempre le ha gustado el mundo del espectáculo, tiene pasión por todo tipo de shows, monólogos, magia, circos, musicales… Pero lo que más le gusta son las actuaciones de comedia: “Conecto más, me río y me lo paso mejor”.
Su carrera como monologuista
Su misión como cómico es “crear buen rollo y hacer disfrutar a la gente”. Empezó su carrera como monologuista después de una crisis existencial: “Sentía que no tenía objetivos que me motivaran, Vitoria se me había quedado pequeña y me empezaba a aburrir”.
Ver un monólogo suyo de su graduación fue lo que le motivó a seguir adelante. “Recordé la sensación tan bonita de estar delante de un público y que se rían contigo”, comenta Richard.
Así que, después de hacer un curso de monólogos en Vitoria, se fue a Madrid: “Allí hice todos las formaciones que existían, me subía a escenarios cada semana y fui mejorando cada día un poco más”.
Se formó con grandes profesionales del sector como Agustín Jimenez, Dani Delacámara, Danny Boy Rivera, Coria Castillo, Carlos Ramos, Luismi García, Javi Gonzalez… También ha sido el ganador del concurso de monólogos de Vitoria-Gasteiz y finalista en más de 10 concursos de monólogos nacionales.
También en el rincón del humor
Además, ha actuado con humoristas como JJ Vaquero y Carolina Noriega en salas a nivel nacional. Pero como él dice, también le gusta ser “profeta en su tierra”. Así, en fiestas de Vitoria va siempre al rincón del humor como espectador y, a veces, como monologuista.
“Hace tiempo me subí al escenario con Ernesto Sevilla, y este año estuve con Grison de La Resistencia para cantar y bailar la canción del Principe de Bel-Air delante de más de 1.000 personas”, recuerda con emoción. Esto, para él, son “pequeños sueños hechos realidad”.
Como hombre polifacético, Richard también se atreve con la televisión. Ha estado en programas como 'Vodafone Yu' de Europa FM junto con Ana Morgade, Iñaki Urrutia, Jaime Caravaca y Pablo Ibarburu.
Pero, sin duda, su “mejor experiencia” televisiva ha sido el programa ‘El Mejor’, presentado por Pilar Rubio. “Buscaban al mejor cómico de Madrid, se presentaron más de 500 humoristas y yo gané uno de los programas”, cuenta.
Su ‘match' en First Dates
También ha estado en el programa First Dates, donde tuvo una experiencia “muy divertida”. Sorprendió a Carlos Sobera pidiéndose un kalimotxo, porque “él también es vasco”.
Buscaba una chica “de su rollo” y no dudó en bailar al ritmo de la música para seducirla. Porque, como dice él: “El que 'parti' y 'reparti', se queda con la mejor party”. Al final triunfó “la party” y 'hubo match' entre la pareja.
Richard cuenta que el programa es “100% real” y que no está guionizado. “Hay situaciones tan surrealistas que el público no se lo cree”, dice entre risas. Él se lo toma todo con una sonrisa, porque “a veces es mejor reír que llorar”.
El humor como estilo de vida
Y es que para Richard Eros alias Partyman, el humor es “un estilo de vida”. De pequeño lo usaba como una “herramienta de supervivencia para caer bien”, pero ahora es algo que forma parte de su vida. “Me ayuda en mi salud mental, si no, no sé qué hubiera sido de mí”, expresa.
Entrenar el sentido del humor, dice, es algo que debería enseñarse en las escuelas. “Si tú mismo te ríes de las cosas que te pasan disfrutarás más de la vida, reírse de uno mismo es lo más sano que hay”, comenta.
Por eso, Richard no quiere perder el niño que lleva dentro, la vida para él es un juego y la ilusión siempre está ahí: “No dejamos de jugar cuando nos hacemos mayores, nos hacemos mayores cuando dejamos de jugar”.