La perrera municipal rechaza mantas para abrigar a los animales

3 enero, 2021

Apasos denuncia que sus voluntarios no han podido abrigar a las mascotas

Son días de frío en Vitoria-Gasteiz. También para los animales, no solo para las personas. Y muchos no tienen la suerte de tener una casa con calefacción en la que permanecer calientes. Entre ellos están los habitantes de la perrera: perros, gatos y otras mascotas sin dueño que apenas tienen sus jaulas para refugiarse. Jaulas que obviamente no están preparadas para las temperaturas del invierno.

perros perrera vitoria

Estos animales combaten el frío gracias a la buena voluntad de asociaciones animalistas o de personas desinteresadas que donan mantas u objetos para protegerlos. Pero este año la donación se ha complicado. Según denuncia la protectora Apasos en su Facebook, los trabajadores municipales de la perrera han rechazado las mantas que los voluntarios han llevado a las instalaciones de Alto de Armentia.

Para terminar el año nos sentimos una vez más decepcionados e impotentes.

Nos daban la noticia desde el ayuntamiento de...

Publicada por Apasos Vitoria en Jueves, 31 de diciembre de 2020

La razón de este rechazo es sorprendente: los empleados alegaron que las mantas "no estaban limpias ni olían bien", según Apasos. Los voluntarios se quedaron perplejos, pero buscaron otras formas de ayudar: compraron rollos de aislante térmico para poner en las jaulas y aliviar el frío de los animales. Pero el encargado de la perrera tampoco les dejó colocarlos, alegando que los perros los romperían mordiéndolos. El resultado es que de 30 jaulas, solo 6 se han quedado con mantas.

Apasos ha denunciado este hecho en su Facebook, lo que ha generado también numerosas quejas en el Buzón Ciudadano por la gestión de la perrera. Lo que critica la protectora es que esta es la primera vez en 16 años que la perrera impide ayudar a los voluntarios con mantas, e incluso "les hace la vida imposible" a sus voluntarios.

Y es que según Apasos las relaciones entre los responsables del centro y la protectora se han vuelto hostiles desde que surgieron las acusaciones de abusos sexuales contra un trabajador municipal sobre voluntarias de Apasos. Y los principales perjudicados de esta hostilidad están siendo los menos implicados: los animales.

Además, conviene recordar que la perrera municipal lleva años necesitando una reforma. Una de las causas principales es precisamente la antigüedad de las instalaciones y la falta de recursos para combatir el frío. Pero el proyecto de reforma lleva ya tiempo paralizado.