El plan de la hostelería vasca para salvar 16.000 empleos y 1.000 negocios

La hostelería vasca tiene un plan. Y confía en que funcione para evitar que su sector tenga aún más perdidas. Esta mañana las tres asociaciones de hostelería más representativas de cada provincia (SEA Hostelería en Álava, Asociación de Hostelería de Bizkaia y Gipuzkoa Hostelería) han presentado un plan de ayudas al Gobierno Vasco.

Un plan que, según los presidentes de estas asociaciones, permitiría la salvación de la hostelería en Euskadi. Los datos y las previsiones no son buenas para sus negocios: el 65% de sus trabajadores están o han estado en ERTE, y de no tomar medidas podrían destruirse 16.000 puestos de trabajo y cerrarse 1.000 negocios de aquí a marzo de 2021. Es decir: el 25% de los trabajadores de hostelería vascos podrían perder su empleo en los próximos meses, según los datos de las tres asociaciones.

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Plan de rescate

Por esta razón han presentado un plan de rescate al Gobierno Vasco para los próximos meses. Según han explicado, este plan compensaría el 50% de las pérdidas que ha sufrido el sector. Tendría un coste de 187.802.000 euros y se fundamentaría en cinco bases: medidas higiénico-sanitarias, defensa del empleo, apoyo a las estructuras empresariales, fomento de la demanda y acompañamiento legislativo de ámbito municipal.

Estos ejes incluyen medidas como la elaboración de un plan de ayudas a fondo perdido para garantizar el mantenimiento de empleo, el pago de los alquileres o los efectos de las medidas contra el coronavirus. También piden que el Gobierno Vasco no rebaje la inversión en promoción turística durante esta legislatura y que se rebaje el IVA de manera temporal del 10% al 4%, en una acción conjunta con el Gobierno central.

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Además, los hosteleros piden la colaboración de los ayuntamientos y que flexibilicen las ordenanzas de espacio público para el mayor uso de terrazas. Vitoria-Gasteiz ya introdujo algunos cambios en su ordenanza para ayudar a la hostelería, aunque puede que no sea suficiente.

Con el incremento permanente de casos parece que Euskadi se dirige hacia unas medidas aún más restrictivas que podrían perjudicar todavía más a este sector. ¿Serán suficientes las posibles ayudas del Gobierno Vasco?