Portal del Rey, San Prudencio y la Plaza de Santa María serán reformadas en 2014

El Ayuntamiento volvía a confirmar este martes que durante 2014 se acometerán tres reformas viarias importantes: la Calle San Prudencio, Portal del Rey y la Plaza de Santa María. Pese a que Gorka Urtaran puso en duda la ejecución de estas reformas durante la presentación del pacto presupuestario, ayer Leticia Comerón confirmó su ejecución, que será financiada parcialmente por el Plan Urban y por el Gobierno Vasco.

Dos de estas actuaciones tendrán lugar en el Casco Viejo y supondrán la recuperación de espacios para los vecinos, sobre todo en la Plaza de Santa María.

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También recuperarán espacio en un entorno hasta ahora inaccesible y en el que el Ayuntamiento trabaja desde hace dos meses: la trasera de Escoriaza Esquivel.

Las obras se encuentran ya muy avanzadas, en una zona llena de matojos y suciedad hasta el pasado mes de noviembre.

Plaza de Santa María

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Vitoria recuperará la que hace unos siglos era una de las zonas con más vida de la ciudad. Ubicada junto ala Catedral de Santa María, la plaza lleva más de una década cerrada al público. En ella se descubrieron restos arqueológicos y en los últimos años ha servido como almacén para las obras de la catedral. Ahora el espacio se recuperará para el público en general, creando un nuevo espacio para los vecinos del casco.

Calle Portal del Rey

El Ayuntamiento insiste en que esta vía se ha quedado anticuada y que es la puerta de entrada al Casco Viejo. Aunque el proyecto inicial contempla la reforma integral del eje que une la Calle Francia con la Virgen Blanca (Portal del Rey, San Francisco, La Cuesta y Mateo de Moraza), parece que estas actuaciones se realizarán por fases. Estas obras serán financiadas con cargo al Plan Urban, según denunciaba ayer EH Bildu.

Calle San Prudencio

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Durante muchos años esta vía ha sido, junto con Dato, el Salón de Estar de los vitorianos. Se trata de una vía muy transitada, sobre todo durante el día (de noche ha perdido en los últimos años su gancho), y en la que las jardineras, los bancos y el suelo siguen siendo de los años 80. Esta reforma es considerada innecesaria por muchos, que ven cómo el Ayuntamiento prefiere realizar obras 'innecesarias' en el centro en lugar de acometer las necesidades de los barrios.