Vecinos del Casco Viejo denuncian la detención de un residente por "racismo institucional"

20 junio, 2018

Omar no tiene papeles que indiquen su nacionalidad, a pesar de llevar 20 años viviendo en Vitoria-Gasteiz

Varios vecinos del Casco Viejo han denunciado la detención de Omar, que lleva 20 años residiendo en Vitoria-Gasteiz. La Policía Local detuvo a este vecino de Vitoria-Gasteiz el pasado 10 de junio por no tener papeles. Actualmente está encarcelado en el CIE (Centro de Internamiento de Extranjeros) de Barcelona, donde está sufriendo "una situación de hambre, incertidumbre y dolor", según sus vecinos, que acusan de "racismo institucional", a la policía y al Ayuntamiento.

La situación de Omar tiene componente extra de tensión por su condición de apátrida. No posee documentación que le atribuya ninguna nacionalidad, por lo que su destino sería "incierto" en caso de que le expulsaran del país.

De acuerdo con los denunciantes, el detenido pasó la noche en la Comisaría de Betoño y al día siguiente le trasladaron a Barcelona. "No le dejaron ni ducharse. Al protestar por ello, le metieron en una camisa de fuerza, en la que pasó las 5 hora de viaje a Barcelona. Sin moverse, comer ni ir al baño", asegura una de las vecinas.

Una vez en Barcelona, la situación parece aún peor, según relatan: "Está en una celda junto a cuatro personas, con un calor asfixiante. Pasa mucha hambre porque les dan una dieta basada en carne de cerdo, cuando muchos de ellos son musulmanes. Ese sitio es una bomba de relojería, porque todo el mundo está a la espera de  que les expulsen".

Omar ya estuvo en el CIE de Aluche en 2012, cuando pasó encerrado 56 días. Después estuvo 10 días más encerrado en Argelia, pero como no pudieron averiguar su procedencia lo devolvieron al puerto de Alicante. De allí volvió a Vitoria-Gasteiz.

  • "Racismo institucional"

Los vecinos del Casco Viejo acusan a España, Euskadi y Vitoria-Gasteiz de ejecutar políticas de "racismo institucional", como la Ley de Extranjería, que regula la presencia de extranjeros extracomunitarios en el país. Para los denunciantes, esta ley "condena a la exclusión, discriminación y criminalización" de miles de personas, así como "la vulneración de los derechos humanos". En 2015, 1.913 personas fueron detenidas en Euskadi a raíz de esta ley. Una cifra que aumentó en 2016, con 2.307 detenidos.

Por ello, el colectivo pide al Ayuntamiento y a la Policía Local de Vitoria-Gasteiz que "cese la persecución con las personas racializadas", además de "cualquier identificación policial con sesgo racial". De la misma manera, también exigen la "inmediata puesta en libertad" de Omar.