El rastro de Vitoria-Gasteiz: el rincón del coleccionismo en la Plaza de España

19 noviembre, 2018

Monedas, billetes, sellos o libros se mezclan con objetos no permitidos como enchufes, lámparas o bisutería

Todos los domingos por la mañana la Plaza de España se convierte en un lugar de reunión para pequeños y mayores. Las terrazas de los bares se llenan siempre que el tiempo lo permite, mientras los niños (y no tan niños) intercambian y compran cromos en el centro de la plaza. Mientras tanto, los más curiosos acuden a los soportales de la plaza a ojear por los puestos del 'rastro' o mercadillo de coleccionismo.

Mercado coleccionismo Puesto de monedas, billetes y lotería

Puesto de monedas, billetes y lotería

35 puestos se colocan todos los domingos bajo los arcos. Ponen al alcance del público objetos que dificílmente podrían encontrar de otra manera. Los más comunes son monedas, libros, llaveros, pines y cómics. En definitiva, la delicia de cualquier coleccionista. Pero algunos puestos también venden objetos que no deberían estar permitidos.

Javier tiene el puesto número uno y lleva desde el año 2014 acudiendo cada domingo a la plaza. Vende monedas, llaveros, calendarios, billetes y artículos de cualquier tipo. Aunque el producto estrella son los pines y las monedas de dos euros de toda Europa.

"Todo esto lo he ido reuniendo desde que tenía 14 años. Quería que fuera para mis hijas, pero ahora ellas me dicen que no lo quieren y que lo venda. Me da pena separarme de todo, pero estoy disfrutando mucho esta etapa con el puesto", comenta Javier.

Uno de sus clientes añade que "muchos vendedores se han ido jubilando, y con ellos las cosas que vendían. Por ejemplo, antes había mucha numismática (coleccionismo de monedas) y ahora cada vez hay menos".

Mercado de Coleccionismo: Puesto de libros, cómics y revistas

Puesto de libros, cómics y revistas

Jose Antonio es uno de los más veteranos del rastro, lleva más de 25 años. Se dedica también a objetos de colección como billetes, chapas de cava o billetes de lotería. Lo que más le demandan son las monedas. Él se dedica a comprar paquetes de ediciones conmemorativas para luego traerlas al puesto.

"Desde que tenía 15 años yo venía aquí a los puestos a cambiar mis sellos. Además yo tengo mi colección personal que no traigo aquí porque quiero guardarla. El día de mañana se la quedarán mis hijos", explica Jose Antonio.

Ambos vendedores tienen sus clientes fijos o amigos, como José Antonio los llama, por la confianza que hay ya entre ambas partes. Reciben encargos concretos, que y ellos localizan, traen y preparan: "Hay veces que también viene gente y me da cosas que tiene por casa. Si sirven para colección yo les doy lo que pueda valer y lo pongo en el puesto", añade Javier.

  • Normativa del Ayuntamiento

Para poder ejercer la venta en la plaza todos los puestos tienen que tener su licencia en orden. Deben pedir permiso al Ayuntamiento y una vez concedido comunicar qué es lo que van a vender. Por estar ahí cada uno de ellos paga 113 euros al año.

Puesto que vende enchufes, bisutería y demás artículos no permitidos

Puesto que vende enchufes, bisutería y demás artículos no permitidos

Desde el Ayuntamiento, todos los domingos revisan que los puestos se encuentren en su sitio y con la licencia. Si hay alguna irregularidad o alguien no está les ponen una multa. Al pagar, los vendedores se comprometen a acudir todos los domingos.

En el año 2014 entró en vigor una nueva normativa que limita la venta a antigüedades y objetos de colección. Sin embargo, en 2015 no se cumplía y a día de hoy sigue sin cumplirse.

Los artículos permitidos son tales como sellos, monedas, billetes, minerales, pines, postales, fotos, libros, calendarios, revistas, lotería, discos de vinilo naipes o cromos.

A día de hoy se ven objetos no permitidos como gafas, planchas, enchufes, lámparas, bisutería e incluso ropa. Estos se venden camuflados entre los verdaderos objetos de colección, aunque son solo algunos puestos los que incumplen esta normativa.