Ertzaintza requisó palos y bengalas a los ultras de la Virtus en Vitoria

10 enero, 2025

Ertzaintza retiró barras de plástico y de metal del autobús en el que viajaban los ultras del equipo italiano

12 de diciembre de 2024. Baskonia recibía a Virtus Bolonia en el Buesa Arena. Un partido "de riesgo", según la Dirección de Juegos y espectáculos. Este nivel de riesgo se explica, entre otras cosas, porque Indar Baskonia mantiene una intensa relación con la afición de Fortitudo, Fossa, el eterno rival de Virtus. Ante ello, Ertzaintza activó un dispositivo de seguridad para evitar peleas en la capital alavesa.

Tal y como confirma Ertzaintza a Gasteiz Hoy, el dispositivo localizó "en ruta al autobús en el cual se desplazan los aficionados de riesgo de Virtus". En ese momento, los agentes pararon el vehículo y requisaron "barras de plástico y barras de metal, así como varias bengalas".

Los ultras de Virtus entraron al Buesa Arena y vivieron el partido desde el cuarto anillo, un nivel superior al de la temporada pasada cuando estaban colocados en el tercero junto a los asientos de prensa.

Ertzaintza asegura al mismo tiempo que también incautó palos de madera y un "artefacto pirotécnico" a un grupo de aficionados de Baskonia. También hubo aficionados de Fortitudo que se ubicaron entre los integrantes de Indar, aunque a algunos de estos aficionados italianos se les impidió inicialmente el acceso a la grada. No hubo, en cualquier caso, ningún enfrentamiento.

Sin “ciudadanos españoles” en Bolonia

La presencia de aficionados italianos en Vitoria no tendrá su imagen de vuelta en Bolonia. La prefectura de Bolonia junto a la policía ha prohibido la presencia de "ciudadanos españoles" en el pabellón. Una medida denunciada por Baskonia en un comunicado oficial.

El club azulgrana considera esta resolución "contraria al espíritu del deporte y los valores de la competición, y manifiesta su disconformidad con el rechazo a la asistencia a eventos deportivos en función del lugar de procedencia".

Indar Baskonia también ha criticado este veto a la afición gasteiztarra. Desde el grupo de animación aseguran que es "otro episodio represivo más del que la Euroliga también es cómplice y prefiere mirar a otro lado". Además denuncian que "este ataque trata de convertir nuestra pasión en pura delincuencia".