Igualdad, integración escolar y 'rock and roll'

17 enero, 2020

12 alumnos del colegio Samaniego participan en el programa El Ensayadero para crear su propia banda de rock

"Ayer aquí hubo magia". Así describió la directora del colegio Samaniego, Cristina Arguijo, lo que ocurrió en la sala de música del centro este jueves.  Y es que allí tuvo lugar la primera toma de contacto con sus instrumentos para una docena de alumnos de 13 y 14 años. Son los que participarán en el programa El Ensayadero, que les convertirá primero en mejores personas y luego en músicos.

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Las siete niñas y los cinco niños que formarán parte del proyecto en Samaniego.

Se trata de un programa educativo lanzado por la asociación Ayuda en acción y la fundación Doble Sonrisa, que desembarca en Vitoria-Gasteiz gracias a este instituto. Consiste en favorecer la integración escolar y el desarrollo personal de los alumnos a través de la música, además de iniciarles en este ámbito. Quiere romper las barreras del abandono escolar, de división de géneros e integrar al alumnado vulnerable.

La idea es que el grupo se reúna todos los miércoles y jueves para ensayar en horario extraescolar, como si de otra actividad cualquiera se tratara. De hecho, los jóvenes no pueden estar más ansiosos por comenzar el proyecto. "Tendríais que haberles visto las caras cuando cogieron por primera vez sus instrumentos", añade Dani, uno de los dos profesores que se encargará de la supervisión de la banda. En ella habrá baterías, cantantes, guitarras, pianos y demás instrumentos.

La meta del proyecto es, simplemente, disfrutar de la experiencia y favorecer las relaciones y el desarrollo personal con la música como excusa. Pero ni los futuros músicos ni sus profesores se ponen límites: no descartan realizar algún concierto, colaborar con otras bandas e incluso grabar su propio videoclip una vez perfeccionen sus dotes musicales. "Estamos en negociaciones con el Azkena Rock para ver si nos dejan su escenario principal", bromeaba la directora de Samaniego.

Este centro escolar es el primero en Euskadi en acoger esta iniciativa, desarrollada previamente en Madrid.