El reto de los scouts de Vitoria-Gasteiz: atraer a nuevos integrantes
Los eskauts vitorianos carecen de nuevos miembros: ¿a qué se debe?
Los grupos de scouts de Vitoria-Gasteiz se enfrentan a un desafío: la falta de nuevos miembros. Desde la pandemia las agrupaciones juveniles han notado una disminución en las inscripciones de las nuevas generaciones ya que, según los monitores, los txikis prefieren jugar en casa en lugar de participar en actividades al aire libre.
Ante esta situación, los grupos eskauts lanzan un llamamiento a las familias para que animen a los txikis a participar en sus actividades.
Los niños prefieren jugar en casa a jugar fuera
En Álava hay seis grupos de scouts divididos en dos movimientos: el Movimiento de Scout Católico que agrupa a cinco grupos (cuatro en Vitoria-Gasteiz y uno en Amurrio) y el grupo laico Arabako Eskaut Laikoa.
Cada sábado los scouts se reúnen para realizar juegos, debates y manualidades, además de organizar salidas al monte y campamentos en Navidad, Semana Santa y verano.
A pesar de esta propuesta atractiva, tanto los grupos católicos como los laicos han notado un descenso en las inscripciones de las nuevas generaciones desde la pandemia.
De hecho, los grupos de San Cristóbal y Arana decidieron unirse hace un año para aumentar su número de miembros hasta alcanzar los 46 niños. En el caso del grupo Los Ángeles, cuenta con 95 jóvenes, pero carece de niños nacidos entre 2010 y 2015.
Los txikis invierten su tiempo libre en otro tipo de ocio más casero
¿Pero por qué ocurre esto? Además del descenso de la población infantil, los monitores de diferentes grupos mencionan un cambio generacional. Los txikis tienen otros intereses, participan menos en actividades extraescolares e invierten su tiempo libre en otro tipo de ocio más 'casero' debido al uso de las nuevas tecnologías.
Y es que el uso de los móviles ha cambiado sus hábitos y los niños prefieren pasar más tiempo en casa conectados en lugar de reunirse en un espacio común.
Las familias se implican menos en las actividades extraescolares de sus hijos
Los monitores también han observado una menor implicación de las familias en las actividades extraescolares de sus hijos. Una falta de implicación que se ha vuelto cada vez más frecuente. Y es que ser miembro de un grupo eskaut no solo involucra al niño o adolescente, sino que también requiere la participación y compromiso de las familias, quienes deben dedicar tiempo al proyecto.
A esto hay que añadir el miedo que sienten algunas familias al "soltar a sus hijos" en actividades que implican pasar un fin de semana o varios días fuera de casa. Esto se debe, en parte, a que muchos txikis aún no han pasado noche en colonias organizadas por los colegios y las familias sienten cierta inseguridad sobre las actividades ofrecidas por los scouts.
Algunas familias sienten miedo de "soltar a sus hijos"
Por lo que los familiares deciden apuntar a sus hijos en estas actividades a edades más tardías y esto hace que los pequeños se pierdan la experiencia de formar parte de un grupo desde una temprana edad.
Aun así, los eskauts insisten en que la experiencia de ser un eskaut es muy enriquecedora. "No sabes lo que es esto hasta que lo pruebas", puntualiza Amaia, monitora del grupo scout Esperantza.
noticia anterior
"No vendemos galletitas": los scouts de Vitoria presentan su lado más real
Los scouts vitorianos buscan distanciarse de los estereotipos de los 'boy scouts' estadounidenses: esto es lo que hacen
noticia siguiente
Detenidos con cincuenta pastillas de éxtasis cerca de una discoteca vitoriana
Ertzaintza ha detenido a dos jóvenes de 28 y 29 años