Ser Green City es fruto de un trabajo conjunto de muchos años, en el que la ciudadanía también debe tomar parte
“No te preguntes lo que Vitoria-Gasteiz puede hacer por ti. Pregúntate tú qué puedes hacer por Vitoria-Gasteiz“. Tomando como base la famosa frase de Kennedy toca reflexionar sobre el título de Green City. Un galardón fruto de un trabajo global: un trabajo institucional de muchos años, pero también de concienciación empresarial y ciudadana.
Aún queda mucho trabajo por delante, pero aquí desgranamos algunas pautas que cada uno de nosotros puede seguir para trabajar por la Green Capital. Unas suponen solo un pequeño esfuerzo. Otras son una labor de concienciación diaria y algunas requieren de una inversión económica que no todos podrán asumir. Olvídate del Ayuntamiento y del resto de gasteiztarras: ¿Realizo yo estas prácticas green?
¿Tiro las colillas al suelo en mi casa? ¿O las cáscaras de las pipas? Si no lo hago en mi casa tampoco lo debo hacer en la calle. Y lo mismo ocurre con las cacas de los perros.
El autobús, el tranvía, la bici o las dos piernas nos permitirán llegar casi a la vez a nuestro destino, si nuestro desplazamiento es inferior a los 15-20 minutos. El vehículo privado cada vez tiene menos presencia en los desplazamientos internos: del 36% de 2008 al 23% de 2018. Los desplazamientos en bici han pasado del 3 al 12% y los desplazamientos a pie también han aumentado.
El cumplimiento de las normas de circulación, aunque en sí mismo no tiene que ver con la sostenibilidad, sí ayuda a conseguir esa Green Capital.
Vitoria-Gasteiz consume unos 106 litros de agua por persona y día. Las reglas de ahorro son claras en este punto: ducharse en vez de bañarse, utilizar inodoros de doble carga o poner la lavadora y el lavavajillas cuando haya suficiente ropa o menaje.
En cuanto a la electricidad destaca la colocación de luces de bajo consumo y las regletas con interruptor (para evitar el stand-by).
El reciclaje es una labor pendiente en Vitoria-Gasteiz. La materia orgánica y el plástico son las tareas pendientes en los alaveses, así como el aceite usado tras la instalación de los nuevos contenedores. El porcentaje de vidrio reciclado alcanza el 81% del generado y el 61% en el de cartón y papel, pero el plástico supone solo un 28% del total. Según la UE, para 2030 se deberá reciclar el 85% de los envases de vidrio, el 75% en el caso del papel y el 55% del plástico.
La reducción de envases en nuestra compra es un paso aún mejor que el de reciclar: si no generamos esos residuos (plástico o papel) no tendremos luego la necesidad de reciclarlos. Comprar a granel y llevar nuestras propias bolsas (o envases) ayudan a reducir la generación de residuos.
La compra de productos de cercanía tiene un doble objetivo: impulsar la economía local y, al mismo tiempo, reducir la contaminación en la cadena de distribución. La compra en comercio de cercanía genera además un mayor dinamismo en la economía urbana y recupera la actividad de las calles.
La domótica ya está presente en muchos sistemas de calefacción. Un sistema que permite el control remoto (desde el móvil) de la calefacción. Sistemas para que la calefacción se encienda poco antes de levantarte o de llegar a casa.
Muchas viviendas de Vitoria-Gasteiz tienen un deficiente aislamiento térmico. El calor se va en invierno por las paredes o las ventanas. Por eso es necesario contar con ventanas (y cajas de persianas) que garanticen el aislamiento. Las paredes también deben tener un aislamiento de calidad, y hay varias técnicas para mejorarlo.
Pero también hay algunos trucos para que mi vivienda esté cálida en invierno: ventilar por las mañanas, bajar las persianas al atardecer, poner alfombras en el suelo y no tapar los radiadores son claves para garantizar el calor.
Las placas solares abundan en muchos edificios de los nuevos barrios de Vitoria-Gasteiz. Sin embargo no todas ellas funcionan correctamente. La presencia de placas (ya sea para calentar el agua o para generar electricidad) contribuye al autoabastecimiento y reduce la huella de carbono.
En Vitoria-Gasteiz hay muchos comercios y portales que, de forma habitual, limpian su parte de acera. Esto aún se sigue realizando en los pueblos, pero en la ciudad cada vez menos. La limpieza viaria es competencia municipal, pero si todos ponemos nuestro granito de arena podemos ayudar.
3 comentarios. ¿Quieres agregar algo?:
El reportaje y el mensaje están muy bien. Que hace el ayuntamiento para ser green? Recoger un premio?
Los jardines no se riegan y no se corta la hierba, los alcorques crecen más que los árboles , árboles que entran por las ventanas de las casas a a mucha altura , árboles enfermos que sueltan una resina asquerosa , y la destrucción de muchísimos árboles por reformas de calles y obras como el tranvía y algo importantísimo que hace el ayuntamiento es tener a una empresa como FCC gestionando la limpieza y retirada de residuos que con la política que lleva últimamente tan desastrosa en la retirada de residuos y vaciado de contenedores va a terminar con la paciencia y concienciación de los ciudadanos ya que últimamente están los contenedores de vidrio y papel en muchas zonas llenos hasta arriba siendo imposible depositar los residuos en ellos. Yo ya se lo que hago por el reciclaje lo que no se exactamente es lo que HACE ESTE AYUNTAMIENTO CON MIS IMPUESTOS POR EL RECICLAJE
Que en este caso, ‘green’ no significa ‘verde’. Tener un jardín verde y cuidado supone gastar muchos litros de agua y que se movilice una máquina diésel para cortarla, manejada por un operario que posiblemente haya ido hasta el lugar de trabajo en un vehículo a motor. Todo menos verde.
Lo de que los contenedores de materia orgánica estén llenos de bolsas de plástico no compostables y que haya autobuses más viejos que la carraca y contaminantes y que pierdan ruedas, las roturas de tuberías que desperdician agua, el corte de árboles para la construcción de unas vías, que no exista un transporte público directo a los polígonos industriales, que haya una central nuclear cerca, parada pero obsoleta y con su terrible potencial, gasolineras en el interior de la ciudad como la de Reyes Católicos, que no haya un sistema de alquiler de bicicletas municipales, que no tengamos autobuses eléctricos, que se recicle solo el 30% del plástico que consumimos, que organicemos maratones y Ironman donde se tiran miles de botellas de plástico, si esto es la ciudad más Green del mundo, lo siento, no hay nada que hacer, el cambio climático es inevitable.
Parece mentira que no exista la opción de no echar basura al suelo. Guardarla en la mano o en el bolsillo hasta encontrar una papelera era lo normal cuando éramos pequeños y si algún pequeño tiraba algo al suelo, se le reprendía.