Un estudio de la Universidad de Zaragoza plantea soluciones para evitar inundaciones del Zadorra
Vitoria-Gasteiz vive rodeada de agua por el norte, el sur e incluso por el subsuelo. Por ello, los alaveses Iosu Aranbarri y Josu Castillo han utilizado su ciudad para un proyecto de la Universidad de Zaragoza. Un proyecto en el que analizan principalmente la inundabilidad en nuestra ciudad, pero más en concreto la cuenca del Zadorra. […]
Vitoria-Gasteiz vive rodeada de agua por el norte, el sur e incluso por el subsuelo. Por ello, los alaveses Iosu Aranbarri y Josu Castillo han utilizado su ciudad para un proyecto de la Universidad de Zaragoza. Un proyecto en el que analizan principalmente la inundabilidad en nuestra ciudad, pero más en concreto la cuenca del Zadorra. Para evitar posibles inundaciones, el proyecto propone desembalses deliberados en los meses de noviembre y diciembre en los embalses de Ullibarri y Urrunaga, tras haber analizado la dinámica del ciclo hidrológico anual y bajo perspectivas que no pongan en peligro la garantía de abastecimiento.
El proyecto, titulado “Estudio y análisis de la inundabilidad en Vitoria-Gasteiz”, también analiza la posibilidad de crear balsas en los ríos del Sur para evitar inundaciones; la ordenación urbanística en los polígonos de Gamarra y Betoño y su riesgo ante inundaciones, o el acuífero sobre el que se asienta la ciudad y su afección a los nuevos sectores urbanizados, sobre todo Salburua, así como a los humedales.
Los alaveses abogan en su estudio por aprovechar el desembalse como herramienta pedagógica ante eventos extremos comos son las inundaciones. Previo aviso a la ciudadanía, se realiza una suelta progresiva y programada que sirva para la identificación del territorio fluvial aguas abajo. La gran regulación de los ríos en general, y del río Zadorra en particular, ha hecho que a menudo se haya perdido la idea de las riberas de los ríos como un territorio inundable ante eventos extremos naturales, lo que ha conllevado la creación de una sensación de “falsa seguridad”. Esto ha provocado además, según el estudio, una ocupación de las zonas inundables, bien como huertos o incluso como zonas residenciales.
Otro de los problemas de la regulación del agua a través del embalse es la ruptura del ciclo de los ríos. Por ello, estos desembalses parciales permitirían remover los sedimentos y evitar la excesiva proliferación de vegetación en el cauce, lo que a su vez sería beneficioso ante episodios de inundaciones que actualmente se dan en las márgenes del río, ya que el mismo tendría una mayor capacidad de desagüe sin necesidad de realizar canalizaciones o dragados. También es destacable que conllevaría una mejor oxigenación del río aguas abajo del embalse y en suma supondría una mejora del estado ecológico del tramo medio del Zadorra, lo que resultaría muy interesante en este momento que se plantea la posibilidad de proponerlo como candidato a ser Reserva de la Biosfera, además de ayudar a cumplir con la Directiva Marco del Agua, directiva europea que obliga a los estados miembros a conseguir un buen estado ecológico en todas sus masa de agua para el año 2015.
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