Blusas y Neskak veteranos se adueñan de la fiesta

8 agosto, 2022

Su alegría y jolgorio protagonizan este 8 de agosto, el penúltimo de La Blanca

Son talluditos, sí, pero demuestran como nadie que la fiesta no tiene edad. Los Blusas y Neskak veteranos salen este lunes a la calle al asalto de La Blanca. Y la alegría y el jolgorio son bien palpables allí por donde pasan. Porque, tras dos años de parón, tenían muchas ganas de diversión. De risas, bailes, reencuentros y chascarrillos. "Hemos vuelto con más fuerza y marcha", advertía un blusa con emoción evidente.

Una jornada muy completa que ha comenzado, como no podía ser menos, con una misa, una ofrenda floral a la Virgen Blanca y un aurresku de honor. Allí, en el pórtico de San Miguel, han repuesto fuerzas con rosquillas y moscatel antes de asistir a un homenaje muy emotivo. El de la neska Esther Espinosa, que ha recibido el reconocimiento municipal por su centenario. Casi nada.

Tras las Dianas en la plaza de España, han seguido la chufla junto a la fanfarre Kirrkinka y las bandas de gaiteros, txistulares y trikitilaris por el centro de la ciudad. Los achaques se olvidan por unas horas para saltar, cantar y lucir de nuevo blusas, abarcas, pañuelos, fajas y txapelas.

Blusas y Neskak veteranos

La mañana ha transcurrido entre degustaciones de algunos pintxos y algún que otro bailable en el 'Meneíto Veterano' de Nekazariak. Todo un aperitivo antes de la comida conjunta, con la que han cogido fuerzas para encabezar el paseíllo.

"Venimos al Día del Veterano porque te encuentras con muchas personas que, durante todo el año, no las ves y este día te encuentras con muchas que tienes cierta amistad", reconoce una neska. "¡Y a ligar, a ligar también!", apunta un compañero veterano. Oportunidades seguro que no les han faltado a lo largo del día. El penúltimo de La Blanca, que nos deja un gran sabor veterano.