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Alternativas para aislar tu vivienda y ahorrar calefacción
Las fachadas y las ventanas son los principales puntos en los que se pierde el calor
El parque inmobiliario de Vitoria-Gasteiz no escapa al problema que acucia a todo Europa: nos encontramos con ciudades con viviendas envejecidas, con una edad media de casi 50 años.
La mayoría no cumplen con los requisitos de confort actuales, especialmente en confort térmico y de emisiones a la atmósfera. Por ello, vamos a desglosar las principales actuaciones que podemos llevar a cabo en nuestras viviendas.
Termografía de un edificio de viviendas. Se aprecia cómo se pierde calor especialmente por las ventanas, los miradores y los cantos de forjado.
- Mejoras en la envolvente térmica
La envolvente térmica del edificio son los cerramientos que separan los espacios interiores y el exterior: paredes, suelos (en el caso de primeros pisos) y techos (en el caso de áticos). Los techos y suelos de las viviendas intermedias no forman parte, ya que dividen dos espacios “calefactados”, por lo que no existe intercambio de temperatura.
Por aquí escapa el calor en invierno y entra en verano, lo que nos obliga a instalaciones de calefacción y de refrigeración. ¿Cómo podemos mejorar? Algunas actuaciones no requieren grandes obras, mientras que otras generan más molestia en el propietario, pero también más ahorro energético y mayor confort.
1.- Aislamiento térmico por el exterior
La actuación más eficiente es añadirle a toda la fachada aislamiento térmico por el exterior. Para ello, existen varias soluciones, que pasan por generar una segunda piel por el exterior del edificio: desde fachada ventilada (paneles aislantes adheridos a la fachada existente, y perfilería metálica sobre la que se ancla el acabado) hasta sistema SATE (aislamiento térmico adherido al exterior de la fachada, sobre el que se coloca una malla y un acabado.
Detalle de Sistema SATE: el aislamiento se fija a la fachada y posteriormente se coloca una malla que permite la adhesión de la última capa de acabado
Hemos visto cómo innumerables comunidades de propietarios se han animado a llevar a cabo esta mejora en sus viviendas, especialmente en la zona de la Avenida de Gasteiz. El plan de Coronación, además, incluye estas mejoras en sus viviendas.
Contras
- El precio. El sistema SATE cuesta, aproximadamente, 60 €/m2 de fachada, mientras que el sistema de fachada ventilada puede rondar los 90 €/m2, dependiendo del acabado (piedra, metálico…). Un precio razonadamente elevado para nuestros bolsillos.
- Comunidad de propietarios. Se requiere votación y aceptación por parte de los vecinos de la comunidad, al ser una actuación en la fachada comunitaria del bloque de viviendas.
Detalle de fachada ventilada: se coloca un rastrelado metálico que soporta los paneles de acabado. Entre el rastrelado se coloca el aislamiento térmico.
Pros
- Es una actuación desde el exterior que no interfiere con la vida en el interior de las viviendas.
- Ahorro: El ahorro, dependiendo de zonas climáticas, puede ser de entre el 30 al 50% en calefacción al año.
- Acabados: Ambos sistemas permiten unos acabados con plaqueta, monocapa, aluminio, piedra, etc. Además de la mejora térmica, la mejora estética es evidente.
- Eliminas condensaciones y humedades.
2.- Aislamiento térmico por el interior: trasdosado de pladur
Únicamente afecta a tu vivienda, por lo que la decisión es sólo tuya. En este caso, la segunda piel se genera por el interior, mediante un nuevo aislamiento térmico con acabado de yeso laminado tipo Pladur.
Trasdosado interior de fachada, mediante rastreles entre los que se coloca el aislamiento. A los rastreles se fija el yeso laminado tipo Pladur de acabado.
Contras
- No es tan eficiente como el sistema anterior, ya que tienes la limitación física del suelo y el techo, que en algunas zonas está descolgado, por lo que no aíslas toda tu fachada.
- Pierdes superficie útil de vivienda, ya que restas un mínimo de 5 centímetros en todo el perímetro de fachada.
- Molestias en el interior de la vivienda al realizar la obra.
Pros
- El precio, en torno a 35 €/m2 de fachada.
- Ahorros en calefacción en torno al 30% al año.
- Sencillez y rapidez, además de poder albergar instalaciones en lugar de hacer rozas en la pared.
- Eliminas condensaciones y humedades.
3.- Insuflado aislante en la cámara de aire
La mayor parte de las viviendas antiguas carecen de aislamiento térmico pero cuentan con una cámara de aire entre la hoja de ladrillo exterior y la interior. Esta medida consiste en llevar a cabo pequeñas perforaciones (en torno a 3-5 centímetros de diámetro) desde el exterior o interior de la vivienda para insuflar aislante en este espacio hasta rellenarlo por completo.
El insuflado es una técnica limpia en la que se introduce el aislante y una vez finalizado el trabajo, la zona queda recogida y con los agujeros tapados. En ningún caso, la vivienda pierde capacidad ya que no se deja maquinaria ni mecanismos instalados que ocupen espacio en la vivienda.
Las empresas de aislamiento trabajan con distintos materiales que se insuflan, en función de las necesidades de cada caso. La celulosa, el corcho o las bolitas EPS son los aislantes más comunes en el insuflado. Para cámaras pequeñas o con diferencia de espesores, el corcho insuflado es una solución recomendada. Al tener más peso que las bolitas EPS, se puede mezclar con la celulosa en cámaras de distintos espesores, para cubrir la totalidad del espacio.
Relleno de aislamiento térmico en la cámara de aire de la vivienda.
Contras
- Pese a que se introduce una pequeña cámara para determinar las condiciones de este espacio, es habitual la presencia de cascotes, instalaciones, pilares o discontinuidades en la cámara de aire, lo que hace imposible que se rellene por completo.
- No elimina puentes térmicos en los cercos de las ventanas, que generalmente cuentan con un ladrillo pasante en todo el perímetro de las mismas, lo que puede favorecer la presencia de condensaciones después de la actuación.
Pros
- Rapidez y sencillez
- No reduce superficie útil ni interfiere con la vida doméstica.
4.- Sustitución de ventanas
El mayor porcentaje de pérdidas se va por las ventanas de la vivienda. Por ello, las medidas anteriores no tienen sentido si no van acompañadas de una mejora en las carpinterías, especialmente si las existentes son vidrios simples. Hay un amplio abanico de posibilidades, pero todas ellas pasan, cuanto menos, por la instalación de ventanas con rotura de puente térmico y vidrio doble con cámara de aire intermedia. La instalación de vidrios bajo emisivos resulta interesante en climas como el de Vitoria-Gasteiz.
Esquema de doble vidrio bajo emisivo con cámara intermedia.
Contras
- Sustituir todas las ventanas de la vivienda es una inversión importante de dinero.
Pros
- Sustituir las carpinterías ya es una medida importante de mejora por si sola. Si además lo combinamos con algunas de las soluciones de aislamiento térmico anteriores, nos garantizamos eliminar por completo los puentes térmicos, condensaciones y humedades en el interior de la vivienda, y conseguimos prestaciones similares a obra nueva.
5- Aislar y redecorar con proyectado de celulosa
Cada vez es más demando el proyectado de celulosa por las posibilidades que ofrece. La celulosa decorativa mejora el aislamiento de las viviendas y locales comerciales, a la vez que redecora el interior de las estancias.
Mediante la técnica del proyectado, la celulosa se adhiere a techos y paredes, cubriendo por completo la superficie a aislar. Esta instalación no requiere de obra y en un día se realiza perfectamente. Esta técnica te dejará la pared o techo con una importante mejora en el aislamiento y la pared estará lista para ser pintada. Con esta solución se mejora no sólo el aislamiento térmico sino también el acústico al insonorizar el espacio y evitar la reverberación.
Contras
– Deberás dejar la habitación a aislar despejada sin muebles.
– Es necesaria una capa de pintura para que la estancia quede con una buena estética.
Pros
– La vivienda tendrá un aspecto renovado y revalorizado.
– Mejoras el aislamiento acústico a la vez que el térmico.
