Familias de Ikasbidea denuncian la falta de plazas en el comedor
40 alumnos han reclamado un servicio que solo tiene 30 plazas disponibles, elegidas a sorteo
Algunas familias de la ikastola Ikasbidea de Durana han denunciado la situación del servicio de comedor para niños de 2 años. Según los padres y madres, el centro no tiene espacio para acoger a todos los txikis que se quedan al comedor y han seleccionado los que recibirán el servicio a sorteo. Esto ha provocado el enfado de las familias, que se quejan de que la Ikastola no ofrece "alternativas serias" para sus hijos.
Por su parte, la ikastola insiste en que "no existe espacio físico para dar un servicio de calidad" en las instalaciones otorgadas por el Gobierno Vasco. La dirección ha manifestado su malestar por la situación, y remarca que la delegación está haciendo las gestiones posibles para facilitar el traslado de las aulas de dos años a otro centro en el futuro. El AMPA del colegio también está gestionando la situación.
Los menores de 3 años inscritos en esta ikastola no van al edificio del pueblo alavés, sino que reciben la docencia en un centro situado en Los Astrónomos, compartido con la Haurreskola Izarra. Esto supone un total de 60 plazas divididas en tres aulas, cuando para el comedor solo hay disponibles 30 plazas.
El conflicto llega con las inscripciones del curso que viene. Algo más de 40 alumnos se han inscrito para el servicio de comedor. Al haber exceso de demanda, la ikastola decide las inscripciones a sorteo, por lo que se han quedado 9 familias fuera del servicio. Finalmente, el número de alumnos inscritos es de 31, dado que han decidido aceptar a unos mellizos como una única plaza de comensal.
"Sabemos que el servicio de comedor no es obligatorio a estas edades, pero si el centro ofrece plaza debe de ser para todos o para ninguno", demanda una de las familias implicadas. El centro ya les advirtió de esta situación a la hora de matricular a sus hijos. Su directora, Begoña Díez, matiza que esta situación no había ocurrido con anterioridad. En otros años se denegaron plazas en el comedor a familias que las pidieron después de matricular a los pequeños, con lo que ya no fue posible otorgarlas.
Las aulas de dos años no están en Durana, sino en una haurreskola de Vitoria-Gasteiz
La situación es complicada para los padres y madres porque algunas familias tienen a los hijos mayores estudiando en Durana y a los pequeños en Vitoria-Gasteiz, con lo que la necesidad del comedor es más urgente. Esto provoca que el servicio de comedor esté muy demandado y sea difícil para las familias recoger a sus hijos durante el periodo en el que deberían estar comiendo.
"Hemos propuesto que haya dos turnos de comidas o que se incremente el personal encargado del comedor, aunque tengamos que pagar más. Pero la ikastola insiste en que no puede solucionar el problema. El Departamento de Educación del Gobierno Vasco también nos ignora", lamentan.
La dirección ve inviable realizar dos turnos de comidas porque ya se probó en el curso 2016-17, sin buenos resultados que garantizaran un servicio de comidas de calidad. "Los niños del segundo turno llegaban a la comida dormidos, porque ese es su horario de la siesta", añade Díez.
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