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Un minuto de pesadilla y un arbitraje polémico condenan al Alavés
Los tres goles anulados y un penalti en contra fueron decisivos en el resultado
El Deportivo Alavés perdió frente al Girona (1-2) por un verdadero cúmulo de acciones infortunadas y polémicas. Tres goles anulados, un penalti pitado en su contra y otro gol inesperado enloquecieron un partido ya de por sí vibrante. Tanto los de Abelardo como los de Machín jugaron un partido muy igualado en el que los colegiados tuvieron más protagonismo del deseado, independientemente del resultado.
El Girona se puso por delante en el 58 con un centro envenenado que engañó a Pacheco. Solo un minuto antes el colegiado anuló un gol legal a Sobrino por supuesto fuera de juego. Fue el segundo de la tarde, dado que en la primera parte había anulado otro a Guidetti por falta de Laguardia.
Hoy era el día de los clubes convenidos en Mendizorroza. Foto: @Alaves
En la recta final del encuentro, anuló el tercero por otro fuera de juego de Manu García (esta vez aplicado correctamente) y minutos después pitó el penalti a favor del Girona, que significo el 0-2. Sin embargo, el Glorioso no se rindió y Tomás Pina metió el 1-2 para intentar el empate en el descuento.
Uno de los descuentos más locos vistos en Mendizorroza. Un aluvión de tarjetas, otro polémico fuera de juego y reyertas varias finalizaron con la afición y jugadores babazorros enfadadísimos y el 1-2 en el marcador. Una derrota de la que se hablará en los próximos días en Vitoria-Gasteiz, por la polémica que la rodea.
- De más a menos
No fue un inicio usual para el Deportivo Alavés, que comenzó con la pelota y generando varias ocasiones de gol en apenas diez minutos. Primero Guidetti tuvo un mano a mano frente a Bono, luego un testarazo de Munir rozó el larguero de la portería visitante y por último Ibai no acertó al dirigir correctamente una volea.
Aun así, los locales continuaron con la pelota y no dejaron actuar demasiado al Girona con su característica presión. Poco después llegó el primer gol anulado de la tarde por una falta de Laguardia, aunque el autor del tanto hubiera sido Guidetti.
Al menos uno de los goles anulados era legal
A medida que fueron pasando los minutos el Girona cogió protagonismo y el partido ganó en velocidad e igualdad. En el minuto 36 los visitantes perdonaron una ocasión clarísima. El Choco Lozano se quedó totalmente solo para rematar en el área, pero mandó el balón a las manos de Pacheco.
Por su parte, los babazorros siguieron intentándolo con centros por las bandas, sin el éxito de los primeros minutos. Una primera parte más calurosa de lo normal finalizó en Mendizorroza sin goles, pero con numerosas ocasiones.
Aun así, Abelardo no debía estar contento con la profundidad de las bandas y cambió a Burgui por Rubén Sobrino en el descanso.
El cambio no pudo ir a mejor, porque el de Ciudad Real remató a portería un centro de Ibai que fue anulado por fuera de juego. Aunque Sobrino estaba en línea y por tanto, el gol debería haber subido al marcador, el linier consideró que estaba ligeramente adelantado respecto a la defensa.
- Del 1-0 al 0-1 en un minuto
El mazazo no pudo ser mayor. Solo un minuto después el Girona se adelantó por medio de una falta directa que botó Aleix García. El centrocampista fue a centrar el balón, pero no lo remató nadie y acabó colándose en la portería de un desprevenido Pacheco.
Nada más recibir el gol, Abelardo introdujo a Manu García por Dani Torres, con el objetivo de ganar más consistencia en el centro del campo. Aun así, el tanto sentó como un jarro de agua fría a un Alavés que siguió intentando el empate, pero con el juego más espeso por momentos.
Hasta el minuto 77, cuando llegó la ocasión ideal. Manu García remató un balón adelantado que rechazó Bono, quedando el remate a placer para Sobrino. Inexplicablemente, el delantero se resbaló cuando la grada ya cantaba gol y el balón se marchó por línea de fondo.
Pero aún tendría más el Alavés. Tres minutos después, Manu García sí que vio portería, pero el árbitro volvió a anular el gol por posición antirreglamentaria. Esta vez, bien anulado. Aun así, Mendizorroza se pronunció en lo que serían tímidas protestas comparado con lo que venía después.
- Un final de locura
En el 85 el colegiado pitó penalti a favor del Girona por un choque entre Ely y Juanpe. El central alavés metió el codo en el salto dentro del área, en una acción sin demasiado peligro de gol. Aun así, el árbitro aplicó la pena máxima y Stuani parecía que sentenciaba desde los once metros.
Los locales aún tendrían más. Cuando se añadieron los cuatro minutos extra Wakaso puso un balón que remató Pina para poner el 1-2 en el electrónico. Aún no había acabado el partido. No obstante, el descuento transcurrió entre un mar de tarjetas y otro fuera de juego polémico que enfureció aún más a la afición y jugadores. Entre protestas y roces el balón apenas rodó en el descuento y el 1-2 se materializó en un ardiente Mendizorroza.
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