El Casco Viejo critica la elevada pendiente en el nuevo acceso a Kutxi
El trayecto desde el nuevo ascensor del Casco Viejo hasta Cuchillería tiene una pendiente mayor que antes de la obra
Las obras de la Cuesta de San Francisco y su entorno estarán listas en un mes: el 15 de noviembre. En los últimos días se están instalando las baldosas en La Cuesta y se ultiman las obras en la acera Sur de San Francisco. Pero las críticas siguen por las obras de la zona.
Las asociaciones Gasteiz Txiki y Eginaren Eginez denunciaron este jueves en el Ayuntamiento la elevada pendiente y la elevada accesibilidad que tiene el nuevo acceso a la calle Cuchillería desde el ascensor. El cambio en la bajada de San Francisco a Olaguibel ha elevado la diferencia de cota entre San Francisco y Cuchillería. Y esto ha hecho que la pendiente sea elevada, como se puede comparar en las dos imágenes.
Igor Nabarro y Manu Arakama denunciaron en el Ayuntamiento que la pendiente es ahora más fuerte que lo que era antes de la obra. Una pendiente incluso mayor que el de la propia Cuesta San Francisco. El concejal de Espacio Público explicó que esta obra cumple con los criterios de accesibilidad y el proyecto realizado era el más adecuado con la nueva configuración.
El acceso a Cuchillería está aún sin terminar: falta por colocar el firme. Pero la pendiente ya está habilitada. Para las personas en silla de ruedas resulta difícil subir por sus propios medios desde el nuevo ascensor hasta Cuchillería. El concejal de movilidad reconocía la elevada pendiente, y explicaba que ya existe una alternativa para las personas con movilidad reducida.
Y esa alternativa es para llegar a Cuchillería desde el ascensor es buscar un rodeo que reduzca esta pendiente, circulando hasta Pintorería y subiendo posteriormente junto a Mendoza hasta llegar a la esquina de Fariña. "El recorrido directo por la Calle Cuchillería iba a ser imposible por el aumento en el desnivel", reconoce Raimundo Ruiz.
Esta propuesta fue denunciada por Eginaren Eginez: "Un itinerario alternativo que genera el doble o el triple de recorrido para llegar al mismo punto no puede ser considerado accesible".
El acceso a esta parte del Casco Viejo ya era complicado anteriormente, por la necesidad de subir la Cuesta desde Mateo de Moraza o las escaleras desde Olaguibel. La creación del nuevo ascensor buscaba reducir estos problemas de accesibilidad. Sin embargo la pendiente supone una última traba para las personas más mayores o con problemas. Tanto la asociación de vecinos como la de personas con movilidad reducida cuestionó este jueves la obra.
La asociación Gasteiz Txiki también lamenta el color gris de la calle. Al mismo tiempo alerta de la peligrosidad del graderío y la creación de una zona de botellón en donde antes no existía.
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