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El Mercado de Domingo Beltrán-Aldabe cierra sus puertas
Los propietarios comunican a los comerciantes el cierre del Mercado del Ensanche, entre Domingo Beltrán y Aldabe
El Mercado del Ensanche, entre las calles Aldabe y Domingo Beltrán, cierra sus puertas. Cinco puestos sobreviven aún en este espacio, que hace años que necesita una reforma que no llega por falta de rentabilidad para el propietario.
Canicería Juanma y Onecha, dos de los locales que permanecen abiertos en el mercado
El espacio es propiedad de la empresa Sucesores de Balugera, y ya ha comunicado a los inquilinos que el 28 de febrero tendrán que abandonarlo. El mercado ha ido muriendo ante la pérdida de puestos, la falta de reformas y el auge de los supermercados. Los últimos cierres y los impagos de alguno de los puestos han hecho que el espacio ya no sea rentable para sus propietarios. Las reformas necesarias no se compensan con los espacios ocupados actualmente.
Tres carnicerías, una charcutería y una pescadería sobreviven hoy en un Mercado que abrió hace más de 60 años. Su decadencia es, como la de muchos mercados, algo reciente, del siglo XXI. Los mercados de barrio ya no son ese punto de reunión en el que poder llenar el carro con tus tenderos de confianza.
En los últimos años los comerciantes han exigido al propietario numerosas reformas, tanto en comodidad como especialmente en cuestiones de salubridad, según asegura Isabel, de Carnicería Juanma. Incluso ha recibido requerimientos de Sanidad para actuar en los baños y en otras canalizaciones. Porque el Mercado del Ensanche, como tantos otros, es un espacio de los años 60, envejecido por el paso del tiempo. En los últimos 20 años han abierto a su lado varios supermercados: Lidl, Eroski y Alcampo están a apenas 200 metros.
Los comerciantes del Mercado del Ensanche, sin embargo, no se resignan a cerrar. Carnicería Juanma lleva un año atendiendo también en su nueva tienda de Domingo Beltrán 31 (frente a Lidl). Y es que hace ya tiempo que esperaban este cierre. Esta carnicería abrió a la vez que el mercado, hace 60 años. Aún hoy mantienen una clientela fiel, que intentan poco a poco migrar a la tienda exterior.
Al mismo tiempo la pescadería, la charcutería y una de las carnicerías crearán un nuevo minimercado en Coronación. Lo harán en un local compartido con la frutería Délika, frente a Jimmy Jazz. Los obreros apuran los trabajos en esta lonja para que puedan trasladarse allí a finales de febrero. Será un espacio más pequeño, adaptado a los nuevos modelos de minimarket.
- ¿Y qué pasará con el mercado?
"Vamos a ir paso a paso, hay que enfriar el mercado", aseguran a Gasteiz Hoy los propietarios en conversación telefónica. Es decir: primero se cerrará el espacio y posteriormente se decidirá su uso futuro. Baluguera gestiona activos inmobiliarios en Vitoria-Gasteiz y otros territorios.
- Los otros mercados de Coronación
El del Ensanche no es el único mercado que agoniza en este barrio. En el mercado Zaldiaran sobreviven hoy una carnicería y una pollería. Dos puestos rodeados por espacios cerrados hace mucho. Este mercado tiene dos pisos que antaño estuvieron llenos de vida. Hace ya un lustro que la pescadería y otra carnicería se trasladaron al exterior, a la Calle Badaya. De momento los dos puestos siguen, sin intención de abandonar. Los propietarios, herederos del primer dueño, no tienen por ahora intención de cerrarlo.
En la Plazuela de Aldabe, junto a Doña Ochanda, Paco es el único comerciante que aún despacha género. Vende carne de vacuno criada por él en Olaranbe y alimentada con pienso casero. Es el único local abierto en este mercado, que tiene muy difícil futuro por las escaleras situadas a la entrada. El espacio, propiedad de varios comerciantes, está a la venta, pero no ha habido por ahora interesados. Paco, en este caso, es propietario de su puesto.
La carnicería de Paco es la única que sobrevive en el Mercado junto a Doña Ochanda
Paco sigue abierto en un negocio que empezó su madre hace 60 años. Aún hoy las puertas de las cámaras frigoríficas son las mismas que hace 60 años. En su interior están las chuletas y la carne de su vacuno que vende, así como los cerdos criados en Treviño.
Tanto Zaldiaran como Aldabe parecen tener fecha de cierre definitiva: coincidirá con la jubilación de los últimos supervivientes de este modelo de negocio.
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