Vitoria-Gasteiz paga 11,2 millones de euros anuales por "la mala gestión de Ecoembes"

20 abril, 2021

Vitoria-Gasteiz podría ahorrar 11,2 millones de euros en la recogida de basuras si hubiese una mejor gestión del reciclaje

Vitoria-Gasteiz gasta cada año 11,2 millones de euros que deberían abonar Ecoembes y Ecovidrio, según un informe de Greenpeace, la ONG Rethinking y el Observatorio de Residuos.

Ecoembes y Ecovidrio solo se hacen cargo de los envases que estén en el contenedor amarillo, azul o verde. Pero no se encarga de los envases que acaban en el contenedor gris, en el suelo o en la vía pública. Y este es el coste que Greenpeace cifra en 11,2 millones de euros anuales.

El Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, sin embargo, ha sancionado a Greenpeace por denunciar la mala gestión de Ecoembes, como desveló en exclusiva Gasteiz-Hoy.  “La ciudad de Vitoria-Gasteiz debería centrarse en exigir tanto a Ecoembes como a Ecovidrio que se responsabilicen del 100 % de sus envases".

Greenpeace lamenta que Vitoria-Gasteiz ha decidido "ejercer presión sobre colectivos que denuncian este sistema injusto para el medio ambiente y para la ciudadanía".

Cómo funciona Ecoembes

Greenpeace acusa a Ecoembes de "ser la principal entidad que está frenando la puesta en marcha de una Ley de Gestión de Residuos verdaderamente eficaz y basada en la protección del medioambiente y las personas".

Las empresas pagan a Ecoembes y Ecovidrio por cada envase que fabrican. Con este dinero, Ecoembes y Ecovidrio paga a los ayuntamientos, que son los encargados de la recogida y separación de los envases. Pero no les pagan por todos los envases que se consumen en la ciudad, sino solo por envase útil que el ayuntamiento les entrega en los contenedores de reciclaje. Es decir, Ecoembes y Ecovidrio cobra por todos los envases que se producen, pero solo paga por los que son aptos para el reciclaje procedentes del contenedor.

En realidad, los consumidores pagamos por el reciclaje. Los envases que llevan el símbolo de las dos flechas enroscadas, lo que se denomina el punto verde, indica que la empresa que produce el envase ha pagado una tasa para su gestión posterior. Esa tasa se cobra a los consumidores al comprar el producto.

Devolución y Retorno

El modelo Ecoembes y Ecovidrio está en cuestión, aunque hay alternativas que se han puesto en marcha en otros países. "La recogida selectiva e incluso la reutilización sería posible con un sistema de depósito, devolución y retorno (SDDR) de envases. Pero Ecoembes sigue apostando por falsas soluciones que no resolverán el problema”, ha declarado Lorea Flores, coordinadora de Greenpeace en País Vasco. “No podemos permitir que Ecoembes siga cargando su responsabilidad económica en la ciudadanía para luego invertir en su imagen y dejar la crisis de residuos que tenemos en España sin resolver”, ha concluido.

La mayoría de los envases siguen yendo aún a la fracción resto, lo que "evidencia el fracaso del modelo de recogida selectiva actual de envases".

"Los envases ligeros y de papel-cartón (ambos gestionados por Ecoembes) o de vidrio (gestionados por Ecovidrio) contenidos en el cubo gris o de mezcla, no sólo presentan una mayor dificultad para su recuperación, sino que ocasionan unos enormes costes. Ecoembes y Ecovidrio no los reconocen, por lo que terminan asumidos y pagados por los Ayuntamientos y cuadrillas".

En total, los costes que acarrea la gestión de los residuos municipales de Vitoria-Gasteiz se estiman en unos 23,5 millones de euros para el año 2019. Casi dos tercios de los costes (14,9 millones de euros) recaen en la fracción resto. No obstante, como se ha indicado a nivel nacional, una gran parte debería recaer sobre Ecoembes y Ecovidrio, especialmente sobre aquellos relacionados con los envases ligeros, de papel-cartón y vidrio.

Tanto Ecoembes como Ecovidrio niegan tener la obligación legal de hacerse responsables de los envases que no se recojan en los contenedores amarillo, azul y verde. Pero sí cobran por su fabricación.

Actualmente se limitan a sufragar, mediante incentivos para la recuperación de algunos envases de la fracción resto, una pequeña cantidad de los costes generados por la gestión de estos envases, mientras que el grueso de costes de recogida y tratamiento se sufraga con los impuestos que paga la ciudadanía. Pero con el Anteproyecto de Ley de Residuos (actualmente en trámite parlamentario), Ecoembes y Ecovidrio deberían hacerse cargo de la totalidad de los costes de la gestión de residuos de envases, independientemente del contenedor donde se recojan.

Propuestas

Ante esta situación, Rethinking, el Observatorio de Residuos y Greenpeace proponen:

  • Exigir a Ecoembes y Ecovidrio que se responsabilice del 100 % de la gestión de todos los envases, incluyendo los que acaban en la fracción de resto.
  • Declararse a favor de la implantación de un Sistema de Depósito, Devolución y Recuperación (SDDR) de envases real y eficiente.
  • Establecer políticas de pago por generación de residuos: quien más genera, más paga.
  • Implementar políticas locales que prohíban los envases de un solo uso.
  • Implementar la separación por fracciones para que no llegue materia orgánica a vertederos.